Después de su sesión tan padre y divertida en el centro de Coyoaca, en donde los dos se veían súper contentos y enamorados. Se llegó el día de su gran Boda en el Hotel La Purificadora en el centro de Puebla. Con toda su familia llenos de mucho cariño que vinieron de varias parte de México y Alemania. Mil gracias Julia y Raúl por permitirme estar con ustedes en todos estos momentos tan mágicos y documentar toda esta felicidad que han vivido y que estoy segura que viviran para toda su vida.
Gracias también a mi gran equipo Antonio Calderón como segunda cámara y Oscar Guzmán mi asistente.
La Purificadora y su gran equipo que realizaron un increíble trabajo.